El prensado en frío es un método de extracción de aceite que se utiliza para producir aceites vegetales de alta calidad y mantener los nutrientes y las propiedades beneficiosas de la materia prima utilizada. En el proceso de prensado en frío, se utiliza una prensa hidráulica para extraer el aceite de las semillas o frutos secos a baja temperatura, generalmente a una temperatura no superior a los 40-50 grados Celsius.
Este método es considerado más saludable y beneficioso que otros métodos de extracción de aceite, como la extracción con solventes, que a menudo implica el uso de químicos y altas temperaturas que pueden degradar los nutrientes y otros componentes beneficiosos del aceite. Además, el prensado en frío produce aceites con sabores y aromas más ricos y complejos, lo que los hace ideales para su uso en la cocina.
En resumen, el prensado en frío es un método de extracción de aceite que utiliza una prensa hidráulica y bajas temperaturas para producir aceites vegetales de alta calidad, preservando los nutrientes y propiedades beneficiosas de la materia prima utilizada.